Amigas y amigos: Las más importantes organizaciones mundiales dedicadas a la protección del ambiente, incluyendo a la ONU, siguen señalando con insistencia sobre los peligros que encierra para la humanidad, el cambio climático por el calentamieno de nuestro planeta, calentamiento provocado por la sobreexplotación de los recursos naturales, No existe ya ninguna duda al respecto: por su codicia, el hombre está atentando contra la vida del planeta.
Los casquetes polares, los glaciares y las altas montañas se están descongelando y se resienten ya los efectos que apuntan hacia una catástrofe ambiental mundial. Fenómenos climatológicos fuera de temporada y de región geográfica y de una ferocidad altamente destructiva, son signos evidentes de la descomposición de los ciclos normales de las estaciones. Hace un par de semanas tuvimos noticias del caso insólito de la formación de tres ciclones que se formaron simutáneamente en el Océano Pacífico. Muy a pesar de lo anterior, quienes basan su poder en la destrucción del medio ambiente, siguen impávidos y hacen caso omiso de las advertencias y evidencias de lo que está sucediendo a nivel mundial.
Y aquí a nivel Comarca Lagunera no cantamos mal las rancheras en cuanto a los atentados contra los recursos naturales específicamente sobre el agua superficial y subterránea, elemento del cual, pese a ser un bien público, vivimos en tinieblas. Por ejemplo, no hay ninguna información última sobre el tema del agua: no conocemos la situación real del acuífero; no sabemos porqué se han tenido que reponer casi el 50% de las norias que surten de agua a la ciudad de Torreón; se desconoce que medidas se están tomando contra los 420 pozos que están extrayendo agua ilegalmente y que fueron descubiertos por el estudio que hizo CONAGUA en 2014; tampoco se ha aclarado aquel asunto de los pozos"pirata"; el llamado programa Agua Futura del gobierno del Estado de Durango es un enigma, el público desconoce de que se trata.
Lo único real es que el acuífero se sigue agotando a la velocidad que la propia autoridad, CONAGUA, ha declarado: 3.5 mts. anuales debido a la sobreexplotación misma que está provocando la contaminación de sales perjudiciales a la salud humana como el arsénico, entre otras.
¿Tenemos derecho a preguntar y saber sobre éstos temas?. ¡Claro que sí!, lo que pasa es que las dependencias del ramo hacen oídos sordos dado que al final de cuentas nadie les va a reclamar sus omisiones pues gozan de impunidad dado que defienden los intereses de los sobreexplotadores.
¿Cuánto tardaremos en sumarnos a las zonas de desastre ecológico nadamás por la codicia de un pequeño grupo de sobreexplotadores?.
Les envío un cordial saludo. Héctor Astorga
