Amigas y amigos: El día de hoy aparece en la sección editorial de El Siglo de Torreón, un artículo firmado por el Sr. Gerardo Jiménez G. por medio del cual nos enteramos que el pasado 19 de enero el nuevo titular de Cuencas Centrales del Norte, Ing. Emilio Rangel Woodyard, tuvo una reunión con los usuarios de agua de la región en donde les manifestó que "para resolver el problema de la sobreexplotación de los acuíferos laguneros había que tomar una decisión trascendental para los laguneros".
El Sr. Jiménez explica que no se les detalló en que consistía dicha "decisión" misma que, sugiere, ya es conocida tanto por los usuarios como por las propias autoridades de CONAGUA. O sea que dicha misteriosa"decisión" se está tomando "entre cuates" y sin tomar en cuenta el punto de vista de los verdaderos dueños del agua subterránea que somos los ciudadanos laguneros.
El Sr. Jiménez agrega también en su artículo que el Instituto Mexicano del Agua (IMTA) presentó a fines de 2015 un estudio técnico de actualización en el cual se refleja "el grave deterioro en que se encuentra (no detalla que clase de deterioro) y la urgente necesidad de recuperarlo aplicando nuevas regulaciones (????). Misterio.
Pero también se habla en el mencionado artículo del proyecto de CONAGUA para invertir 8,500 mil millones de pesos (una bicoca, pues) que se aplicarán en "adquirir y aplicar tecnología que aumentarán la eficiencia en el uso del agua". Parece que se va cumplir el viejo sueño de los grandes productores agropecuarios laguneros de que sea el Gobierno Federal el que cargue con tales inversiones que en justicia debieran correr a cargo de los propios productores quienes cuentan ya con varios apoyos por demás sustanciosos.
Lo que resulta evidente es la forma sucia y tenebrosa en que se está tratando el asunto del agua subterránea de La Laguna. Un problema, el de la sobreexplotación, tan sencillo de resolver lo complican al máximo y se proponen gastos multimillonarios para ello. EL PROBLEMA DE LA SOBREEXPLOTACIÓN SE RESUELVE METIENDO EN CINTURA A LOS USUARIOS INESCRUPULOSOS QUE POR AÑOS HAN VENIDO ABUSANDO DE LA EXTRACCIÓN DEL AGUA.
¿Qué es tan difícil hacer cumplir la Ley de Aguas Nacionales?
¿Qué es tan difícil vigilar que el usuario se sujete al volumen autorizado?
¿Qué es tan difícil combatir a quienes están extrayendo agua ilegalmente?.
Ojalá que "la decisión trascendental que hay que tomar" según manifestó el Ing. Emilio Rangel W. no sea la de la preparación para la privatización oficial del agua subterránea de La Laguna..
Les envío un cordial pero muy desalentado saludo. Héctor Astorga